"El progreso de un artista es un continuo autosacrificio, una continua extinción de la personalidad". T. S. Eliot

domingo, 29 de marzo de 2015

La novela más corta de la historia

"Yo era un tenaz fumador. Una noche quedé dormido con un tabaco en la boca. Desperté con miedo de despertar. Parece que lo sabía: me había nacido un ala de murciélago. Con repugnancia, en la oscuridad busqué mi cuchillo mayor. Me la corté. Caída, a la luz del día, era una mujer morena y yo decía que la amaba. Me llevaron a prisión". 

Zama (1956), Antonio di Benedetto

sábado, 28 de marzo de 2015

Intento de manifiesto del Negativo #1

Para empezar, el arte del Negativo no puede acabar en -ismo.

Me dijo: aquí hace falta un movimiento, un nuevo grupo, aún más nuevo, otra corriente. Tenemos que unirnos. ¿Cómo que unirnos? Sí, tú y yo. Tenemos que unirnos y formar un movimiento. He pensado en los Escritores del Negativo, o mejor, en la Poética del Negativo. ¿Cómo del negativo? No tiene sentido, será de la negación, o de la negatividad... o, en todo caso, de lo negativo. No, no, del negativo, como la película de las cámaras convencionales. No lo entiendo, no tiene sentido. Claro que tiene sentido, claro que lo entiendes, ¿verdad que sí? No, contesté.

Yo sabía perfectamente que para él nada de esto tenía sentido. Él sabía que yo lo había entendido perfectamente.

jueves, 26 de marzo de 2015

Pussy Time 2

Estoy pensando en ese caramelito de leche merengada que evoca al mismo tiempo a tu abuela y a esa quinceañera con mallas que vive en el piso de abajo. Aliento de leche merengada, o de café, o de vino picado pero qué más da. Vino es y en vino te convertirás, así que bebe. No quiero leche, mamá, no me gusta la leche. Tampoco el merengue. Sólo quiero masticar azúcar, caña de azúcar, masticar la caña áspera y hueca y seca como un insecto dulzón. Una caña sin azúcar pero con alcohol, por favor. Una caña doble y cortada, con un poco de leche. En la 2 hablaron de un macho y de su lechaza humeante que cubre la prole de su desovadora demersal. No quiero cortarme, mamá, no me gusta cortarme. Cuando sea mayor quiero leche sola con mallas. Cuando sea aún más pequeño quiero beber el vino en que nos convertiremos. Esa quinceañera que vive en el piso de abajo, que seguro será pelágica para que pueda dispersarme en su columna de agua, ese pensando humeante, ese estoy de caramelito de leche de merengada.

The Comparison (1992), Jan Saudek

viernes, 20 de marzo de 2015

Diálogo con la escupidora de libros

Feria del Libro:  
   -¿Tiene algo de Kafka?
   -No.
   -¿Y de mascotas?
   -Tampoco, lo siento.
Eso lo dicen porque ahora han aprendido. La primera vez dijeron que sí y la vieja manoseó los libros y les escupió. Todos tenían algo de Kafka. Y el que no, tenía algo de mascotas.